Los humanos no son las únicas criaturas que han viajado al espacio. Durante los primeros días de la Carrera Espacial, varios animales tomaron el rol de los astronautas para varios propósitos. Inicialmente, los animales eran enviados al espacio para asegurarse de que cualquier criatura podría sobrevivir el viaje. Otros experimentos se enfocaban en los efectos de someterse a muy baja gravedad en criaturas que respiran oxígeno, así como el efecto general de un viaje de ese tipo.
Los primeros animales en viajar al espacio fueron moscas de la fruta, para ver cómo les iba bajo radiación. Más tarde se enviaron peces, insectos y mamíferos que tomaron vuelo en nombre de la ciencia.
Los animales han sido parte integral de la exploración espacial a lo largo de su historia. Han proporcionado datos muy valiosos que han contribuido a nuestra capacidad para entender mejor el espacio y, por supuesto, para preparar mejor a sus contrapartes humanas para los prolongados viajes espaciales.

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